ALIMENTACION. Bajo el nombre de Sabuesos Suizos, se agrupan perros de tamaño y peso diferente y por lo tanto sus necesidades calóricas mínimas en Kcal. diarias son distintas. Para el San Huberto son de 1.400 a 1.500, para los Sabuesos suizos, de Lucerna y de Berna llegan a las 1.050 - 1.300 y para los pequeños sabuesos, entre 750 y 950. Durante el período de la caza, la ración debe tener un volumen limitado pero de un alto poder nutritivo, sobre todo por la presencia de grasas que, según muchos autores, aumentan en los perros la resistencia a la fatiga. CUIDADOS DIARIOS. Estos sabuesos son animales extremadamente generosos que por lo tanto tienen necesidad, para expresar al máximo su capacidad, además de una alimentación correcta, condiciones higiénico-ambientales óptimas, vacunaciones fuera del período de caza y de un control de las heces hecho a través de un examen microscópico con el fin de determinar la presencia de parásitos, que pueden causar graves enfermedades. Una preparación atlética hecha de manera oportuna, completa la capacidad y el rendimiento de estos sabuesos. En los ejemplares con pelo liso, la limpieza de la capa debe realizarse de manera alternada con un guante de crin y un paño suave. En los ejemplares de pelo duro, se utiliza, sobre todo el pelaje, un cepillo de cerda dura alternado con uno de cerda blanda. CON EL VETERINARIO. Los ejemplares provistos de espolones son sometidos, inmediatamente después del nacimiento a una pequeña intervención para amputarlos. La conformación del pabellón auricular, que tiende a cerrar el meato auditivo, crea condiciones de "falta de aire" y una mayor posibilidad de crecimiento de gérmenes patógenos. La terapia está basada en la extracción de un eventual cuerpo extraño presente y en una cura local a base de antibióticos.